La estrecha relación que tengo con el fútbol femenino me lleva a dejar esta entrada que llega de un interesante artículo periodístico sintetizando algunos de los datos arrojados en los papers originales del bien conocido grupo escandinavo de investigadores representados por Peter Krustrup. Los estudios se enmarcan en el proyecto Soccer and Health que podéis consultar en este enlace: http://www.ifi.ku.dk/english/research/section/integrated_physiology/pk_football_health/ Una muestra mas de que jugar es único, y además, te llevas algún beneficio extra tengas la edad que tengas.
Traducido y adaptado del artículo original: “Health gains for grown-up soccer players” publicado en:
Ser madre de niñas que practican fútbol por lo general significa compartir el viaje a los partidos y verlas jugar. Pero una nueva investigación muestra que las mujeres que se unen a la diversión de patear una pelota de fútbol pueden mejorar su salud ósea y del corazón.
Investigadores de Dinamarca reclutaron a más de 70 mujeres de 20 a 47 años que no tenían antecedentes de jugar al fútbol cuando eran niñas o adolescentes. Un tercio de las mujeres fueron asignadas al azar a un grupo para la actividad de salir a correr. Otro tercio a la actividad de un equipo de fútbol, y el resto sirvió como grupo control sin realizar ninguna actividad.
Durante 14 semanas, las mujeres en los grupos activos de correr o jugar al fútbol practicaron una hora al día durante sólo dos días a la semana.
Al final del período de estudio, las mujeres de ambos grupos de ejercicio habían mejorado en una serie de indicadores de la salud del corazón, el equilibrio y la fuerza muscular, en comparación con las que no se habían ejercitado. Sin embargo, las ganancias fueron mayores entre las mujeres que habían jugado al fútbol en vez de correr.
Por ejemplo, las corredoras mejoraron su consumo máximo de oxígeno, un indicador de la aptitud cardiovascular, en un 10 por ciento. Pero las jugadoras de fútbol mejoraron en un 15 por ciento.
Y jugar al fútbol no sólo condujo a un mejor equilibrio y la mejora de la fuerza muscular, esta práctica también aumentó la densidad mineral ósea en un promedio de 2 a 3 por ciento. Teniendo en cuenta que después de 40 años de edad las mujeres pierden masa ósea a un ritmo de aproximadamente 0,5 a 1 por ciento al año, las ganancias con el fútbol son equivalentes a recuperar de tres a seis años de la edad ósea, según el informe publicado en el la revista científica escandinava de medicina y ciencia del deporte, Scandinavian Journal of Medicine and Sport Sciences.
¿Por qué era el fútbol mucho mejor para los huesos de la mujer y el corazón? Peter Krustrup, profesor asociado de fisiología del ejercicio en la Universidad de Copenhague, dijo que el fútbol le dio a las mujeres que lo practicaban un entrenamiento más diverso que la actividad de correr.
"Se analizaron los patrones de actividad durante el fútbol, y se observó múltiples sprints, giros, luchas, remates y tiros a puerta", dijo. Los investigadores especulan que los patrones de actividad variables eran más estimulantes para los huesos que simplemente trotar o correr a un ritmo constante.
Otros estudios realizados por el Dr. Krustrup y sus colegas han demostrado beneficios similares en el corazón y en los huesos en los jugadores de fútbol masculino. Un estudio examinó la función muscular y el equilibrio en un grupo de 65 a 75 años de edad, en hombres que habían jugado al fútbol recreativo la mayor parte de sus vidas y comparado con los que no. En una prueba de equilibrio sobre una pierna, los jugadores de fútbol mayores realizaron el test tan bien como hombres de 30 años de edad. Los hombres mayores que no practicaron fútbol tuvieron el doble de caídas durante la prueba de equilibrio que los mayores que sí practicaron.
Mientras que mucha gente asocia al fútbol con los huesos rotos y lesiones musculares, el riesgo de lesiones entre las jugadoras de fútbol recreativo estudiadas fue bajo. Aunque las mujeres mantienen intensidad y son competitivas cuando jugaban, el nivel de intensidad del juego era mucho menor que en los partidos disputados en la escuela secundaria, universidad o clubes deportivos.
"Cuando juegas al fútbol en el parque o entre amigos, el riesgo de lesiones es mucho, mucho menor que si usted juega partidos competitivos contra rivales locales de otro club", dijo Krustrup.
Dr. Krustrup dijo que aunque muchos adultos piensan en sus opciones de ejercicio sólo para correr o ir al gimnasio, el estudio muestra el valor de los deportes de equipo de forma recreativa.
"Sabemos mucho sobre el entrenamiento de fuerza, atletismo y ciclismo ya que son deportes muy fáciles de estudiar en el laboratorio", dijo Krustrup. "Pero lo que ocurre es que muchas personas en todo el mundo juegan al fútbol, baloncesto, etc... Es muy importante entender los beneficios para la salud de los deportes y hacer hincapié en que hay factores motivacionales y sociales relacionados con los deportes de equipo que puede aumentar la posibilidad de la práctica de jugar de por vida y de un estilo de vida físicamente activo. "
Investigadores de Dinamarca reclutaron a más de 70 mujeres de 20 a 47 años que no tenían antecedentes de jugar al fútbol cuando eran niñas o adolescentes. Un tercio de las mujeres fueron asignadas al azar a un grupo para la actividad de salir a correr. Otro tercio a la actividad de un equipo de fútbol, y el resto sirvió como grupo control sin realizar ninguna actividad.
Durante 14 semanas, las mujeres en los grupos activos de correr o jugar al fútbol practicaron una hora al día durante sólo dos días a la semana.
Al final del período de estudio, las mujeres de ambos grupos de ejercicio habían mejorado en una serie de indicadores de la salud del corazón, el equilibrio y la fuerza muscular, en comparación con las que no se habían ejercitado. Sin embargo, las ganancias fueron mayores entre las mujeres que habían jugado al fútbol en vez de correr.
Por ejemplo, las corredoras mejoraron su consumo máximo de oxígeno, un indicador de la aptitud cardiovascular, en un 10 por ciento. Pero las jugadoras de fútbol mejoraron en un 15 por ciento.
Y jugar al fútbol no sólo condujo a un mejor equilibrio y la mejora de la fuerza muscular, esta práctica también aumentó la densidad mineral ósea en un promedio de 2 a 3 por ciento. Teniendo en cuenta que después de 40 años de edad las mujeres pierden masa ósea a un ritmo de aproximadamente 0,5 a 1 por ciento al año, las ganancias con el fútbol son equivalentes a recuperar de tres a seis años de la edad ósea, según el informe publicado en el la revista científica escandinava de medicina y ciencia del deporte, Scandinavian Journal of Medicine and Sport Sciences.
¿Por qué era el fútbol mucho mejor para los huesos de la mujer y el corazón? Peter Krustrup, profesor asociado de fisiología del ejercicio en la Universidad de Copenhague, dijo que el fútbol le dio a las mujeres que lo practicaban un entrenamiento más diverso que la actividad de correr.
"Se analizaron los patrones de actividad durante el fútbol, y se observó múltiples sprints, giros, luchas, remates y tiros a puerta", dijo. Los investigadores especulan que los patrones de actividad variables eran más estimulantes para los huesos que simplemente trotar o correr a un ritmo constante.
Otros estudios realizados por el Dr. Krustrup y sus colegas han demostrado beneficios similares en el corazón y en los huesos en los jugadores de fútbol masculino. Un estudio examinó la función muscular y el equilibrio en un grupo de 65 a 75 años de edad, en hombres que habían jugado al fútbol recreativo la mayor parte de sus vidas y comparado con los que no. En una prueba de equilibrio sobre una pierna, los jugadores de fútbol mayores realizaron el test tan bien como hombres de 30 años de edad. Los hombres mayores que no practicaron fútbol tuvieron el doble de caídas durante la prueba de equilibrio que los mayores que sí practicaron.
Mientras que mucha gente asocia al fútbol con los huesos rotos y lesiones musculares, el riesgo de lesiones entre las jugadoras de fútbol recreativo estudiadas fue bajo. Aunque las mujeres mantienen intensidad y son competitivas cuando jugaban, el nivel de intensidad del juego era mucho menor que en los partidos disputados en la escuela secundaria, universidad o clubes deportivos.
"Cuando juegas al fútbol en el parque o entre amigos, el riesgo de lesiones es mucho, mucho menor que si usted juega partidos competitivos contra rivales locales de otro club", dijo Krustrup.
Dr. Krustrup dijo que aunque muchos adultos piensan en sus opciones de ejercicio sólo para correr o ir al gimnasio, el estudio muestra el valor de los deportes de equipo de forma recreativa.
"Sabemos mucho sobre el entrenamiento de fuerza, atletismo y ciclismo ya que son deportes muy fáciles de estudiar en el laboratorio", dijo Krustrup. "Pero lo que ocurre es que muchas personas en todo el mundo juegan al fútbol, baloncesto, etc... Es muy importante entender los beneficios para la salud de los deportes y hacer hincapié en que hay factores motivacionales y sociales relacionados con los deportes de equipo que puede aumentar la posibilidad de la práctica de jugar de por vida y de un estilo de vida físicamente activo. "